Confiabilidad y rentabilidad son dos factores prioritarios en la industria petroquímica. Menor necesidad de reparaciones, mayor tiempo de vida útil y con ello mayor eficiencia de operación, son argumentos que hablan a favor de Bornemann.
Los costos de servicio y mantenimiento en las bombas de doble husillo, en comparación con otras tecnologías, son extremadamente bajos. Los productos a transportar – como por ejemplo óxido de etileno y fosgeno – , representan un cierto potencial de riesgo, tanto para el ser humano como para el medio ambiente. Esto determina la gran importancia de la absoluta estanqueidad de la bomba: un requisito que Bornemann cumple. Pero también fluídos con muy baja viscosidad en presencia de alta presión de vapor, pueden ser transportados con seguridad por nuestras bombas.